Divulgación y confidencialidad


Esta sección es en cierto sentido previa a la Parte 5: Proteger su idea. Los peligros de divulgación son reales, y deben tomarse en serio en cuanto empiece a pensar en su invención.

Es importante entender que proteger su idea frente a la divulgación no es exactamente lo mismo que proteger su idea frente a las infracciones.

Proteger su idea frente a la divulgación depende en gran parte de las medidas de sentido común que Vd. mismo debe aplicar desde el día en que por primera vez se le ocurre su idea. Proteger su idea frente a las infracciones depende en gran medida de un uso correcto de los procedimientos jurídicos formales en el momento oportuno para hacer uso de ellos. ¡Por eso las Partes 1 a 4 van antes que la Parte 5!

(una excepción es la Parte 5 > Información confidencial y acuerdos de no-divulgación, que puede ser útil leer conjuntamente con esta sección.)

Valorar el riesgo de divulgación

Desvelar una idea sin disponer de protección jurídica adecuada siempre es peligroso. Los principales riesgos son:

  • Alguien puede usar el conocimiento de su idea en su propio beneficio, lo que generalmente se traduce en pérdida para Vd.
  • Divulgar ahora puede impedirle obtener una patente válida más tarde.

En las fases más iniciales de una idea, el problema que se les plantea a muchos inventores es doble:

  • Por lo general, no es aconsejable solicitar una patente demasiado pronto. El momento en que se solicita la patente puede ser de importancia crítica (véase la Parte 5 > El proceso de patente.)
  • Sin embargo, para progresar con la invención, puede resultar inevitable un cierto grado de divulgación.

Entonces ¿cómo puede proteger su idea en estas fases tempranas de su desarrollo?

Los riesgos de divulgación se distribuyen, en términos generales, en dos categorías:

  • Revelación a personas determinadas en reuniones privadas

    Este tipo de riesgo es controlable, siempre que tome algunas precauciones básicas, que indicamos más adelante.

  • Divulgación pública

    Los peligros aquí son menos obvios. Áreas especialmente problemáticas son:

    • Publicidad de los medios y concursos. Ambos pueden ser útiles una vez que haya protegido jurídicamente su idea, pero desde luego no antes.
    • Las invenciones que tienen su origen como proyectos de estudiantes, en especial si hay un requisito de exhibir o publicar su trabajo. El personal docente con frecuencia no entiende que cualquier forma de exposición pública de una idea constituye divulgación a efectos jurídicos,y puede tener serias consecuencias.

¿De quién se puede fiar?

No debiera tener problemas por revelar su idea a las personas cuyas profesiones les exigen observar la confidencialidad en todos los tratos con clientes. Entre éstas están los abogados de patentes, otros juristas y el personal de la oficina nacional de PI. También debería incluir a los funcionarios públicos, tales como asesores de negocios o de tecnología y administradores de planes de financiación.

Cuando trate con cualquier otra persona, y en especial con empresas, no debe revelar nada sin al menos (a) un acuerdo de no-divulgación (NDA) firmado y (b) las formas gratuitas de protección jurídica, como derechos de autor y diseño no registrado (de los que se habla en la Parte 5).

Estrategia de divulgación

Debe evitar:

  • Un secretismo obsesivo.
  • Exigir pagos para revelar cualquier detalle de su idea.

Poca gente estará dispuesta a ayudarle si utiliza tácticas tan negativas. En lugar de ello:

  • Antes de hablar con empresas o personas que no estén vinculadas por obligaciones de confidencialidad (ya sea su código de conducta profesional o un NDA firmado), decida exactamente cuánto puede contarle sin describir las partes inventivas de su idea. Desvelar en términos generales de qué se trata (“Es una ratonera nueva”) puede no plantear problemas; revelar lo que la hace novedosa es peligroso.
  • Cuanto más hable de los aspectos técnicos de su idea, mayor será el riesgo de revelar secretos. En lugar de ello, intente centrar su presentación en las ventajas competitivas de su invención: por ejemplo, “Es más barata”, “Es más fiable”, “Es más fácil de usar”.
  • Sea diplomático pero firme acerca de la necesidad de restringir la divulgación. Si la gente con la que está hablando le pide más detalles, insista en que firmen un NDA. Si no lo quieren firmar, ¡váyase! Aún cuando firmen, revele lo menos posible.
  • Aunque esté protegido por un NDA, tenga mucho cuidado con lo que revela a expertos en el campo de su invención. Es posible que sólo con uno o dos detalles puedan adivinar las características que hacen única su invención.